martes, 15 de enero de 2013

UN TIPO SERIO (JOEL COEN & ETHAN COEN, 2009).


Título: Un tipo serio.
Dirección: Joel Coen & Ethan Coen.
 Año: 2009. Fecha de estreno: 08/01/2010
País: Francia, El Reino Unido, Estados Unidos
Duración: 105 min. Género: Drama, Comedia.
Reparto: Michael Stuhlbarg, Richard Kind, Fred Melamed, Sari Lennick, Aaron Wolff, Jessica McManus, Peter Breitmayer, Brent Braunschweig, David Kang, Benjy Portnoe.
Distribuidora: Universal Pictures.
Productora: Working Title Films, Studio Canal, Mike Zoss Productions, Relativity Media.

Por fin Job rompió el silencio, y maldijo el día en que había nacido.

CUANDO LAS FÓRMULAS NO TIENEN LAS RESPUESTAS.

            Con “Un tipo serio” los hermanos Coen vuelven la mirada hacia su infancia y a través de los recuerdos se sirven, ayudados por su equipo habitual, para reconstruir la comunidad judía dentro de la que crecieron en una ciudad del  Medio Oeste.

             La película nos lleva a un lugar anónimo, año 1967, en la que “el tipo serio” del título es Larry, un profesor judío de Física (los padres de los Coen también eran profesores) que a pesar de estar rodeado todo el día de fórmulas, sin embargo descubrirá que éstas no le ayudan a comprender lo que sucede a su alrededor: Y de comprender va esta historia, de dar un sentido a una vida que de la noche a la mañana se derrumba, aunque como espectadores intuimos que este tipo serio ha debido estar enfrascado en sus abstracciones, dejando desatendido todo lo que está al margen de su mundo científico y sin fisuras. Hasta que abre un día los ojos. ¿Y qué ve? Que su mujer le pide el divorcio. Que sus hijos pasan olímpicamente de él. Su hermano está instalado en su casa, absorto en un mapa de probabilidades del universo que lleva por título “El mentaculus”, y si fuera poco, dentro de las cuatro paredes del colegio en el que trabaja, tiene que soportar el chantaje de un alumno y unas notas anónimas que no dicen nada a su favor, pudiendo echar por tierra la plaza a la que aspira. ¿Se acuerdan de Wilt, el personaje creado por el escritor Tom Sharpe?

  Es entonces cuando empezará a hacerse preguntas, con el inconveniente de no encontrar respuestas ni en ese estupendo Rabino que recuerda al mismísimo Gandalf sacado de “El señor de los anillos”, ni en ninguno de los supuestos sabios que conocen al dedillo las Sagradas Escrituras. Sus pilares, la religión y las fórmulas matemáticas, no parecen servirle ahora de mucho. Y se lamentará: “¿Qué significa eso? Resulta que nada es como yo pensaba”.

            Si como repite Larry en más de una ocasión, todas las acciones tienen sus consecuencias, siendo  acordes con lo que se hizo, entonces si has sido un hombre bueno, deberías recibir cosas buenas, pero del mismo modo que su hijo ve las imágenes de los programas de la TV distorsionadas por las interferencias, el tipo serio también ve que su realidad no es como él desearía, y que el destino interfiere para que todo le vaya mal. Como le dice un rabino: “Así es la vida. No todo lo que hace el jefe tiene que gustarte”.

            Y así, efectivamente, es la vida. No todo sale como uno quisiera y por eso esta película de un tipo corriente y moliente, con problemas que cualquiera puede tener, nos resulta tan cercana. Los Coen nos vuelven a entregar una película que sin estar exenta de ese humor al que nos tienen acostumbrados, nos invita a reflexionar acerca del sentido de la vida, de nuestras acciones y creencias. Se trata de una tragicomedia atípica, como atípicas suelen ser algunas de las historias que nos ha dejado este dúo más dinámico que ninguno: “Arizona baby”,  “O brother” o  “El gran Lebowski”.

            Un acierto la elección del protagonista, Michael Stuhlbarg (le veremos en breve en “Lincoln” y en “Hitchcock”) un actor que teniendo una gran trayectoria y reconocimiento en el teatro y la televisión, sin embargo no es conocido por la mayoría del público, dando una mayor verosimilitud a la historia: podría ser el vecino de al lado. Excelente su interpretación. La recreación de la época  así como las costumbres de los judíos (estupendo el cuento narrado en yiddish que sirve de introducción, al margen de la historia principal, así como la ceremonia del bar mitzvah[1]) nos meten en  una historia que gustará a los seguidores de los Coen y a aquellos espectadores que disfrutan de películas que sin apenas argumento ni alardes de ningún tipo, parecen atender a  nuestras dudas cotidianas.  

Mazel tov[2]

Patricia L.D.



[1] Ceremonia celebrada en una sinagoga con la que se admite a un chico de trece años como adulto en la comunidad judía.

[2] Buena suerte o enhorabuena.


2 comentarios:

  1. Qué ganas de ver esta película, suena estupenda, la verdad es que lo que he visto de los Coen me ha encantado. La crítica invita a ver ésta y lo que más me llama la atención es todo lo que cuentas de cómo el protagonista se ve de pronto por unos derroteros inesperados para él por las cosas que a veces tiene el destino. Como la vida misma. Me ha gustado muchísimo esta crítica.

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  2. Gracias Daniela! Y no nos olvidemos de todo lo bueno que también nos depara la vida.Como las amistades;-)
    Un fuerte abrazo,
    Patricia

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